La Región de Los Lagos, según el informe de empleo del INE, sigue siendo
una de las regiones con menor índice de cesantía, tal como ha sido la tónica en
los diez ultimo años, esto, a partir del cambio de la encuesta nacional de medición
del empleo. El empleo que nos lleva a ser la región líder en ocupación es el
empleo independiente, por cuenta propia e informal, si bien las personas
ocupadas tienen ingresos regulares, estos ingresos provienen de diversas
actividades como emprendimientos familiares, pequeño local comercial, el comercio ambulante,
feriantes, pequeños agricultores campesinos, mariscadores de orillas, pesca
artesanal, turismo familiar, formas de ocupación, que no están protegidos. Por ello
es necesario tener una política regional de empleabilidad, que ponga en la
agenda del gobierno central y regional las prioridades para proteger estos
empleos. El Gobierno Regional debe poseer estudios que se actualicen permanentemente del
cambio de las distintas forma de empleo que ocurren en la región, que permita concatenar estas
necesidades con la oferta formativa, pero también regular las distintas formas
de empleo, porque si no se corre el riesgo que se destruyan puestos de trabajos protegidos, los que serán reemplazados por ocupados informales, informalidad creada
por un sistema de mercado, donde la gran empresa no se hace cargo de la protección
del empleo, más bien promueve la precariedad del para generar mano de obra a bajo costo, generando una tremenda desigualdad social, que
termina por agobiar y marginar a importantes números de habitantes. Este
fenómeno de la realidad regional debe abordarse con políticas responsables, donde estas cifras
de pleno empleo son un indicador más que nos muestra la realidad, pero no es la realidad en si misma, la observación de los que pasa en nuestro entorno es el reflejo de una realidad mucho más dura. Ya tuvimos un estallido
social el 18 octubre, en la región vivimos una crisis social en abril 2016 tras la
marea roja, ahora tenemos un aumento del comercio informal en las dos principales
ciudades de la región, Puerto Montt y Osorno, aumento que es el reflejo de una necesidad de empleo, que en ausencia de este, las personas ven como su única opción, ocupar los
espacios públicos para tener acceso a un ingreso para el sustento familiar. Al terminar
el año 2019, insistimos en nuestro llamado a la autoridad regional, tómese en
serio la política de empleo regional, tomé medidas concretas para trabajar en
un programa de reconversión laboral que apunte a poner los recurso donde todos
tengamos la oportunidad de mejorar nuestras condiciones de trabajo, en sintonia
con el potencial de desarrollo local, transformemos esta realidad en una oportunidad y no en un problema, convoque a una mesa regional donde todos los actores sociales estén presente en una misma mesa, no escatimemos esfuerzo en esta tarea del 2020.
Directorio Provincial Central Unitaria de Trabajadores
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