Estimadas y compañeros!
Saludos a las
y los dirigentes sindicales y a todos los presente de este acto del Día Primero
de Mayo.
Como todos los años nos reunimos para conmemorar y recordar a los compañeros y
compañeras
que han entregado sus vidas por defender los derechos sindicales, laborales y
sociales de los trabajadores y sus familias.
Saludamos y rendimos homenaje a los dirigentes y dirigentas sindicales que han mantenido viva la llama del
sindicalismo a través de la historia, nos inspira la lucha por la
libertad, la justicia y la igualdad.
Esos son los principios por los cuales nos organizamos, nos unimos y nos
movilizamos.
Este primero de mayo encuentra a la
sociedad chilena sumida en una profunda crisis política, crisis de credibilidad y
de confianza y nuestra posición frente a ella es que solo se puede comenzar a salir
de este estado cuando el país conozca toda la verdad, los responsables asuman y
la justicia haga su trabajo.
De esta crisis se sale con más
democracia, es nuestra institucionalidad la que
ha fracasado, es por ello que el país espera que se tomen las medidas para
avanzar en mejorar las instituciones para que la ciudadanía vuelva a creer en
ellas.
Se requiere de una pronta regulación
de las campañas políticas que termine con la participación de las empresas en la
decisión del voto ciudadano, se requiere
terminar con el tráfico de influencias y la pega para los familiares de los
dirigentes políticos, en definitiva una ley que termine con la corrupción y las
malas prácticas.
Necesitamos una nueva Constitución
Política que resguarde los derechos de los ciudadanos y que defienda los
intereses del país ante aquellos que con el poder abusan y corrompen. El actual Parlamento está incapacitado para
aprobar una nueva constitución y debe ser la ciudadanía quien participe y
apruebe una Carta Fundamental a través de una Asamblea Constituyente.
Hemos dicho que Chile puede ser mejor,
para ello debe ser más democrático, más igual y más justo, ha llegado el momento de
hacer una Reforma Laboral que permita
terminar con el abuso empresarial y la falta de derechos laborales.
Una Reforma que proteja la libertad
sindical y nos deje en igualdad de condiciones con los empleadores para
discutir nuestras demandas, es por ello que rechazamos
en la propuesta de Reforma los contenidos que instalan los servicios mínimos y
turnos de emergencia durante la huelga.
De igual forma nos oponemos a la
flexibilidad laboral, disfrazada de adaptabilidad en el proyecto propuesto al
Parlamento y exigimos a los parlamentarios no aprobar esa propuesta.
El proyecto se ha quedado corto al no
asegurar que en la respuesta del empleador a la negociación colectiva, el piso que los trabajadores
tienen ganada es negociación anterior con su respectiva reajustabilidad.
Con esta reforma no serán muchos más
los trabajadores que negocien porque la negociación colectiva por empresa dejará a más de
un 80% de los trabajadores sin negociar.
Desde esta tribuna reclamamos y exigimos que el Gobierno proponga
negociación colectiva por rama, sector o servicio de la actividad única forma
de extender la negociación a trabajadores que hoy no tienen este derecho.
Si queremos justicia social debemos exigir
poner fin a las AFPs porque estas han entregado y seguirán entregando a las
chilenas y chilenos de la tercera edad pensiones miserables que los llevan
directo a la pobreza.
Lo que los trabajadores hemos dicho y
seguimos diciendo es no más AFPs. Queremos un
sistema público, sin fines de lucro y que asegure pensiones que permitan vivir
de manera digna los últimos años de la
vida.
El 80% de las chilenas y
chilenos se atienden en la salud pública, con largas listas de espera y en
condiciones a veces indignas, el Estado debe mejorar la salud pública y
entregar a los ciudadanos una salud pública oportuna, de calidad y digna para
ello debe reformar el actual sistema.
La Reforma Educacional debe
acelerar su tranco, los proyectos de Reforma Educacional que faltan deben
ingresar pronto al Parlamento y no deben ser negociados y asegurar el fortalecimiento
de la educación pública de calidad y sin
fines de lucro.
En nuestra región,
no estamos contentos con las cifras de desempleo, el dos coma ocho de
desocupados en la región, no da cuenta de la calidad del empleo, los bajos
salarios, y que más del cuarenta y tres por
ciento de los ocupados están sin contrato.
La pesca artesanal, nuestras caletas, están a punto de desaparecer, por
una política que tiene la actividad sin recursos naturales y con ello la alimentación
de los mercados de los trabajadores se verá afectada.
La pequeña agricultura campesina, los huertos familiares, la actividad se
ve amenazada por la falta de comercialización.
La actividad forestal, la venta de leña, la extracción de alerces, se restringida
por el cambio climático, los países industrializados contaminaron el aire
produciendo el calentamiento global, y los campesinos deben hoy sufrir las
consecuencias.
Toda nuestra solidaridad con la huelga de los ex presos políticos, que
luchan por una pensión digna, completan ya cuatro día sin solución.
Un abrazo a todas los afectados del volcán Calbuco, la naturaleza los
tiene lejos del lugar donde nacieron, trabajan, pidiendo por que pronto retorne
todo a la normalidad.
¿Cómo SALIMOS DE ESTE
LETARGO? DE ESTE MAL SUEÑO, Para lograr estos no solo se debemos hablar, necesitamos un
sindicalismo más capaz y de acuerdo a
los tiempos, con trabajadores más organizados.
Necesitamos avanzar en la unidad real de los trabajadores y sus
organizaciones.
Necesitamos mayor disposición
a movilizarnos y presionar por nuestros derechos, por más democracia y justicia social.
Desde hoy tenemos que iniciar
un camino de acciones que nos permita a
la brevedad convocar a una gran movilización nacional.
Porque Chile también somos
nosotros.
Porque los trabajadores
somos el país real, hagamos realidad nuestros
desafíos y levantemos con fuerza la bandera de la CUT.
Una CUT de lucha, consecuente y movilizada.
VIVA CHILE
VIVAN LOS TRABAJADORES
VIVA LA CUT.
JOSE PACHECO SANCHEZ
PDTE CUT LLANQUIHUE
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